Este dibujo la he tomado prestado del blog sharonmanship.wordspress.com |
Hoy quiero hablas de los chakras y la danza. Los chakras son
centros energéticos que conectan nuestros nervios, hormonas y emociones. Forman un vínculo entre nuestro cuerpo energético y nuestro cuerpo físico, y va paralelo a nuestro sistema neuroendocrino-inmunitario. Hay siete chakras mayores, que son los que trataré hoy, y varios más pequeños.
1) El primer chakra llamado Muladhará (sostén de la raíz) está a nivel del base del cuerpo en la zona del perineo. Está influido en lo seguras que nos sentimos y cómo nos envolvemos en el mundo. La confianza, la independencia dependen de este chakra igual que lo conectadas que nos sentimos con la Tierra. Las zonas del cuerpo que corresponden a este chakra son la columna, el sacro, el recto, las articulaciones de la cadera, la sangre y el sistema imunológico. Cuando no hay suficiente energía en este chakra, o hay bloqueos, se pueden convertir en inseguridades, enfados, violencia.
Todos los movimientos de la cadera del danza del vientre, accentos, círculos, ondulaciones etc, liberan y conectan con la energía de los dos primeros chakras. Llevando la atención al primer chakra mientras realizamos los movimientos de cadera conectamos con la zona y la danza se convierte en una liberación meditativa. Pero si nuestra atencion sigue estando en la mente, razonando y opinando sobre cómo uno hace el movimiento o planeando lo que hará el día siguiente, se trabaja solamente a nivel muscular.
Hay un movimiento en especial, el shimmie o las vibraciones, que se usa no solamente en la danza del vientre si no en varias sabidurías antiguas como el Kundalini Yoga y Tantra. Al realizar la vibración con la cadera se eleva la energía vital del primer chakra y sube hasta los demás chakras del cuerpo. Lo que se siente es algo parecido al extasis, un cosquilleo en la zona del perineo que crece y crece, te relaja y llena de energía y alegría al mismo tiempo.
2) El segundo chakra se llama Suadhisthana (su propio lugar de estar) y está ubicado uos centímetros debajo del ombligo. En las mujeres corresponde con el lugar del útero (aquí puedes leer más sobre el útero y nuestro segundo chakra Nuestro útero y La danza del útero). Es el centro de gravedad del cuerpo, centro energético o sede de la vida. Se relaciona con el deseo, las emociones, la sexualidad, la reproducción y la fecundidad. Es el centro del bienestar, del estar centrado en uno mismo por excelencia, fundamental en la práctica de la meditación. Estar centrado supone hallarse bien conectado con el ritmo de la respiración. En nuestro cuepro físico corrsponde con la vulva, la vagina, el útero, el cuello del útero y los ovarios.
Para visualizar el reccorido energético del segundo chakra cuando bailamos me gusta usar la metáfora del péndulo. Si nos imaginamos la columna vertebral como el hílo del péndulo y nuestro segundo chakra como el péndulo, podemos ver cómo se mueve cuando realizamos los movimientos de cadera como los infinitos, círculos, vaivén...
3) El tercer ckakra llamado manipura chakra está a nivel del plexo solar. Está relacionado con los órganos del sistema digestivo como y a nivel psicológico está relacionado con la identidad en el mundo social, la autoestima y la confianza en uno mismo.
4) El cuarto chakra, Anahata chakra está relacionado con el corazón,el sistema circulatorio, los pechos, los pulmones, las costillas, la parte superior de la espalda y los hombros. Esta asociado a nuestra capacidad de expresarnos emocionalmente, la compasión, el amor y el bienestar.
Cuando realizamos los movimientos de la danza con el torso y el pecho en la danza del vientre estamos conectando y trabajando el tercer y cuarto chakra. Hacemos la energía circular y girara mientras masajeamos con el cuerpo la zona y el chakra.
5) El quinto chakra Vishudha se relaciona con la comunicación, el crecimiento y el poder de transmitir y expresar. Está relacionado con el sistema respiratorio (nariz, garganta, oído, laringe, tráquea, bronquios, pulmones) y los tiroides. En la danza trabajamos liberamos este chakra moviendo el cuello, relajando la barbillay la mandíbula, con movimientos de cabeza hacía los laterales.
6) El sexto chakra Ajña también se suele llamar el tercer ojo, está relacionado con el pensamiento, la percepción espiritual, poder de observar y aceptar. Se relaciona con la glándula pineal, la cabeza, los ojos y el cerebro.
7) El séptimo chakra Sahasrara se coloca en el cuerpo energético, justo por encima de la cabeza y está relacionado con la finalidad más importante de nuestras vidas y la conexión con lo divino.
No hay ningún chakra que sea más importante que el otro, y la danza del vientre trabaja desde la base, desde el primer chakra y eleva la energía vital hacía los siguientes chakras. Cuando llega hasta arriba, danzar es mcuho más que realizar movimientos cordinados y bellos, es estar conectada con cada célula de su cuerpo. Es como si naciera una nueva consciencia que nos lleva a través de la música y se manifiesta en la improvisación. Tanto si es una improvisación a solas, o en grupo, es como si hubiera una conexión con todo alrededor y el cuerpo fluye. En las improvisaciones en grupo es como si las bailarinas pudieran hablar entre ellas sin palabras, están conectadas a un nivel superior y forman parte del mismo cuerpo que es el universo. Entonces, la danza no es sólo terapeutica si no un viaje hacía la plenitud y el éxtasis.
me encanto..
ResponderEliminarY a mí... Muy buena información como base. : ) Buscaré que movimientos van relacionados con cada chakra. 😊
ResponderEliminarExcelente información me encanto si sería bueno saber que movimientos van relacionados con cada chakra súper esa idea
ResponderEliminarbuena informacio vien padre
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